SAN ADRIAN Y BAIZA (Abruptos cortados sobre Ergoyena)

Magnífica excursión de poco más de tres horas realizada el viernes por la sierra de Urbasa, que a estas alturas de la vida aún no la conocíamos. Fuimos con mi tío, el que vino con nosotros al Larrun ver repor, y que va a ser un clásico a partir de ahora en nuestras excursiones.
Ubicación: Sierra de Urbasa, Navarra.
Cimas: San Adrián (1.113m) y Baiza (1.181m).
Desnivel: 151m.
Distancia: 16km.
Duración: 4h.
Acceso: Partimos desde el túnel de Lizarraga, al que se llega desde Etxarri-Aranaz y cogiendo la carretera que lleva a Estella. Se atraviesa el pueblo de Lizarraga, donde comimos después, y se sube el puerto del mismo nombre hasta coronarlo. Pasado el túnel, ya en la otra vertiente, se deja el coche en una explanada que hay a mano derecha. Ojo, porque el mapa señala el pueblo de Lizarraga.

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Habíamos venido con mal tiempo desde Gipuzkoa, pero al llegar a la Barranca había más sol que nubes y nos animamos. La idea originaria era ir por la izquierda (este) hacia el Sarasa y Peña Blanca, pero vimos mejor tiempo al oeste. Así que salimos por la derecha (oeste), por esta pista que faldea toda la sierra de Urbasa por el sur.



De ahí venimos.



La pista es muy cómoda.



La pareja de jubilados.



Vemos a nuestra derecha las peñas, por aquí muy amables y tentadoras, pero que en la otra vertiente son unos cortados de aúpa.



Donde son frecuentes los buitres, claro.



Cuando llevamos media hora por la pista, en un pequeño cambio de rasante, nos desviamos a la derecha. Queremos mambo, hartos ya de tanto hormigón.



Y vaya si acertamos, porque de repente llegamos a un cortado espectacular con el Beriain presidiendo el horizonte y el valle de Ergoyena aquí debajo, con el pueblo de Lizarraga en primer plano.



La misma foto en formato apaisado, esta vez añadiendo los pueblos de Unanua (izq) y Dorrao (der).



Desde el mismo cortado miramos a la izquierda y asoma la ermita. Allá vamos, pensando que aquello es Santa Marina.



Varios mojones nos indican el camino más adecuado para llegar a la ermita.



Ya la tenemos.



Esos cortados son los que titulan el reportaje de hoy.



La ermita de San Adrián, que dicen que protege al valle de Ergoyena de la tormenta: "San Adrian, txikia baina ausartia“. (San Adrian, pequeño pero valiente).



Con sus plegarias en la puerta.



Las localidades de antes y el Beriain que aún no despierta.



Al norte tenemos la Barranca.



Los cortados.



El corredor donde nos hemos asomado antes.



Al lado están los buzones.



San Adrian (1.113m), 45 minutos hasta aquí.



Buzón antiguo.



Más peñascos.



Otro que otea el horizonte desde un mirador de vértigo.



Dejamos este rincón que nos entusiasma.



Y os presento al Baiza, techo de Urbasa, nuestro próximo objetivo. Bajaremos por el bosque hasta el collado de Etxarri, en el centro de la foto, y lo atacaremos por el mismo cordal, como lo veis pintado en rojo.



Nos vamos ya hacia el Baiza por el camino que se interna, por el oeste de la cima, en el bosque.






Hallamos una borda que bien puede servir de guarida en caso de una fuerte tormenta.



Vaya bosque más bonito. Esto en noviembre tiene que ser la pera.



Ya estamos en los rasos. Hemos dejado de lado la pista, que da una vuelta un poco tonta.



En el collado de Etxarri me detengo para observar los destrozos que causa el jabalí en la hierba.



A ver si el barco ha zarpado ya...



Ya estamos en el cordal, habiendo dejado la pista a la izquierda.



Seguimos la valla y nos va a llevar hasta la cima.






Ahí tiene que estar.



Ya estamos en el Baiza (1.181m), 1h y 40 minutos desde el coche.



Su buzón.



Camino traído.



La prolongación del cordal hacia Santa Marina y Bargagain está inmerso en la niebla.



San Donato sigue también tapado.



Os acerco Etxarri Aranaz.



Estuvimos reponiendo fuerzas en la cima mientras la niebla se iba por momentos y nos dejaba ver otras cimas.



Los tres magníficos.



Aralar. Ahí voy a cometer mi próxima fechoría...



Bajamos, esta vez directos a la pista por el bosque, y nos fijamos en este árbol. No sabemos cuál es...



Me vuelvo a acercar al collado de antes y ahora sí...






Ahora volveremos al coche por la pista. Por el de la izquierda iríamos otra vez al San Adrián. Antes hemos bajado por ahí.






Me llevo este bosque grabado en la memoria.



Dejamos una balsa a la derecha.






Y varios cruces que, siempre desde el lado izquierdo de la pista, nos llevarían otra vez a la ermita.



A estas alturas de la mañana pegaba un calorcito importante.



Una miradita atrás para enseñaros por los parajes donde anduvimos.



Muy cerca ya del coche.



A punto de llegar. La próxima vez iremos por las cimas que veis de frente. Queda pendiente.



Y bajamos a comer al pueblo de Lizarraga, al restaurante Zugain. Conocido por sus copiosas comidas a precio irrisorio.



Y os dejo el mapa, dividido en dos partes. El primero cubre la salida desde Lizarraga hasta la cima de San Adrián.



Y el segundo, la prolongación hasta la cumbre de Baiza.



LAS NOTAS (La escala es del 1 al 5):
DIFICULTAD: 1,5. Pista en la mayor parte del recorrido. Ojo con la niebla.
BELLEZA DEL ITINERARIO: 3,75. Espectaculares cortados y bonitos bosques.
IMPORTANCIA DE LA CUMBRE: 3.
El tiempo pasa y seguimos descubriendo rincones fascinantes por nuestro paisito. Esto es una gozada.