domingo, 29 de septiembre de 2019

EZTENAGAKO TXURRUA (Sorpresas a la guipuzcoana)

Podía parecer que lo más cercano a casa, es lo que mejor conocemos. Pero a veces hay sorpresas. Este recorrido transcurre por un recóndito valle, bastante bonito, y sube una elevación discreta pero interesante por su panorámica. Está en el macizo de Andatza. Entre Aia y Orio. Y tiene un nombre curioso.
Ubicación: Macizo de Andatza, Gipuzkoa.
Cima: Eztenagako Txurrua (350m).
Duración: 2h y 15min.
Acceso: Partimos desde Mañarinzelai, un grupo de caseríos que está antes de llegar a San Martin de Aia, en la carretera que comunica Orio y Aia.

10:00. Dejamos el coche en este rincón (37m), en la carretera que desde Orio sube a Aia.

Tomamos una pista que llanea junto a un riachuelo.

Pasa al lado de una casa y se interna en un bosque.

Al cabo de un rato, giramos a la derecha y comienza a ganar altura.

El bosque nos protege del calor reinante.


Llegamos a este caserío.

La cima está encima.

Detalle de la casa.

Subimos directamente, sin senda, por los manzanos.

Y posteriormente hemos de progresar por un bosque hasta salir a la carretera.

La cima está cerca, pero nos va a obligar a avanzar por una senda cerrada por la vegetación. Más incómoda que difícil.

11:19. Eztenagako Txurrua (350m), en una hora y cuarto desde el coche.

Muy buen mirador de la costa guipuzcoana y sus primeras elevaciones importantes.




Orio.

Zarautz y el ratón de Getaria.

Aia.

San Martin de Aia.

Hernio y Gazume.

Hacia Andatza.

Descendemos la parte más incómoda.

Y ya por carretera volvemos al punto de partida. La bodega de txakolí de Arguiñano.



Está el día precioso para mirar al horizonte del mar.


12:15. Fin del itinerario.

LAS NOTAS (La escala es del 1 al 5):
DIFICULTAD: 2,5. Itinerario que exige atención en varios puntos al perderse la senda. Parte final incómoda.
BELLEZA DEL ITINERARIO: 3. Precioso valle de subida y buenas vistas hacia el mar y la costa.
IMPORTANCIA DE LA CUMBRE: 1.
Y ASÍ LO VIO MI PADRE: Mi partenaire me comenta que "me llamó la atención cómo se plantan viñedos en cualquier barranco".
De vez en cuando nos seguimos llevando sorpresas en Gipuzkoa.

viernes, 27 de septiembre de 2019

TXARRIBIZKAR (En el valle de Unciti)

Esta excursión recorre el valle de Unciti. Un rincón cercano a Pamplona que, sin embargo, vive tranquilo, alejado del mundanal ruido. Subimos una colina modesta, satélite de la Peña Itzaga, pero con buena perspectiva sobre los pueblos cercanos.
Ubicación: Macizo de Itzaga, Navarra.
Cima: Txarribizkar (838m).
Duración: 1h y 30min.
Acceso: Partimos desde la localidad navarra de Najurieta, accesible desde la carretera que une Lumbier y Urroz Villa tomando un desvío.

10:21. Partimos desde este punto de Najurieta (605m).

Salimos por una pista y ya vemos el cordal a la izquierda.

Extensos campos de cereal. Al fondo, la Higa de Monreal.


Tomamos a la izquierda un sendero que se dirige a la montaña.


Y poco más tarde, otro más estrecho que rodea la cima por el sur.

Alternando tramos de bosque.


Subiremos esta pequeña elevación dando la vuelta, sin hacer caso a las rampas de los motoristas.

Y desde su punto más alto, divisamos nuestro objetivo de hoy.



Muy cerca.

11:17. Txarribizkar (838m), en una hora desde el coche.

Tenemos a la derecha, muy cerca, la Peña Itzaga, techo de este valle.

Hacia la Higa.


Aquí con más detalle.

El punto de partida.

Irulegi.

El Pirineo, desde el Anie hasta Gamueta.

Y desde el Agüerri hasta Aspe.

Bajamos por el sendero.

Y torcemos en esta vaguada.

Atravesaremos unos cuantos campos de cereal, preparados para la siembra.


Fin del itinerario.

Nos desplazamos hasta la cercana localidad de Artaiz, donde se ubica la iglesia (románica) más bonita del valle de Unciti,


LAS NOTAS (La escala es del 1 al 5):
DIFICULTAD: 2. Ruta corta y poco exigente, aunque tiene varios tramos fuera de sendero, sobre todo en el descenso.
BELLEZA DEL ITINERARIO: 3. Un valle tranquilo, bonitas vistas al Pirineo y preciosa iglesia de Artaiz.
IMPORTANCIA DE LA CUMBRE: 1.
Y ASÍ LO VIO MI PADRE: Mi partenaire me comenta que "nos llamaron la atención estos pueblos tan tranquilos, ya casi abandonados, tan cerca de Pamplona".
Esto es lo que dio de sí el valle de Unciti.